Puta madre, tengo unos 15 minutos para postear antes de vomitarme sobre el teclado ya que, en el cyber en el que estoy, tienen musica de "R.B.D" y "jash" o no sé cómo putas se escriba pero que me da un dolor desde el esfinter hasta la boca del estómago exacervado aún más por la gente a mi lado hablando pendejadas por microfono.
Y no tengo la mínima idea de qué postear, así es que recurriré al nuevo sistema aleatorio de elección de posts.
Ruleta ruléa, ruleta ruléa, dime por favor lo que el profeta postea...
Pff ni modo, yo quería escribir sobre putas pero en esta ocación le toca el turno a la autoestima.
Según un grupo de científicos de la COGEASI, una manera sencilla de saber qué tan alta tienes la autoestima es la siguente:
Mírate al espejo e imaginate que eres el padre de alguien. Luego, esa persona que ves en el espejo (o sea tú) es tu hijo. Mira su rostro, su cuerpo, piensa en sus logros, en sus amigos, en su situación económica, en su forma de ser, en su salud. Míralo a los ojos, a su rostro, a su cuerpo de nuevo y pregúntate si te sientes orgulloso de tu hijo(a) que tienes al frente.
Si te sientes orgulloso, entonces tu autoestima se encuentra firme.
Si te averguenzas , tu autoestima está por los suelos.
Si ni siquiera lo puedes mirar, eres un posible suicida o asesino enserie.
Al mirarnos desde un punto de vista exterior, somos más capaces de juzgar nuestras virtudes y defectos, reconocer nuestros éxitos y fracasos, dándonos como resultado la manera en que nos sentimos con nosotros mismos o la manera en que nos conceptualizamos.
Yo ya hice la prueba en dos circunstancias diferentes y sucedió esto:
Un sábado por la noche mirándome al espejo...
Autoestima.- ¡Eyy, eyy! Espérate... ¿A donde crees que vas vestido de esa manera?
F.P.- Voy al antro ¿por qué?
Autoestima.- ¡Porque te ves insultantemente guapisimo!
F.P.- Tienes razón, el salir vestido así de guapo puede ser algo realmente ofensivo e injusto para los demás, regresaré a cambiarme.
Autoestima.- Sí, amor.
Un domino por la mañana mirándome al espejo...
F.P.- ¡A la verga! Qué feo me veo...
Autoestima.- Sí, en efecto, eres un asco...
F.P.-Sabes, se supone que tú eres mi autoestima y debes de hacerme sentir mejor.
Autoestima.- Sí, pero ¿para qué quieres que te mienta, si te ves de la puta madre?
F.P.- Snif...
Y ya, clínicamente soy un bipolar proclive a la esquizofrenia y con la autoestima más abajo que la suela de un enano. Pero aún no pierdo la esperanza en que un día, desde su helicóptero y usando unos binoculares, me vea pasar un magnate buscando a quién escupir desde el cielo y le ordene a su piloto aterrizar para buscarme con su socio a quien le diga: "sabes, ese tipo que va caminando como muy chingón se ve que es una mega verga, vamos a contratarlo para que salve nuestra empresa y nos hagamos más ricos de lo que ya somos"
Luego de que aterrizen y me encuentren, me dirán: "Hola joven, mientras escupíamos gente desde el cielo en nuestro helicóptero, te vimos caminando como si fueras muy chingón con nuestros binoculares y nos dimos cuenta de que eres una MEGA VERGA, ¿Te gustaría trabajar con nosotros y ganar millones para que salves a nuestra empresa y nos hagas más ricos de lo que ya somos?"
A lo que yo le respondería: "Bueno, nada más me limpio este líquido que me cayó desde el cielo y firmo el contrato". Y listo, afortunado sea el mecenas que se topo con esta mina de oro virgen.
Animo a los que tienen la autoestima por los suelos, no es malo ser más feo que la verga o ser un fracasado, y si se sienten mal con su persona aquí les muestro un manual para sentirse o ser más chingón que los demás.
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