¡¡Anuncian pelea de Mayweather vs Pacquiao en… EL COLISEO DE ROMA!!

…jajaja, nada como un buen título SEO friendly y embustero para atraer visitas.

 

Cruda..
Desde el domingo en la mañana quería escribir sobre esto, pero… digamos que estaba algo indispuesto.

No desperté del todo bien. La resaca fue más grande lo que esperaba, y además encontré una cicatriz en el codo que no estaba allí la noche anterior y un poco de lodo en la parte trasera del pantalón. ¡Maldita sea, juro por todo el Olimpo que no lo vuelvo a hacer!

Afortunadamente cuento con un proverbio filosófico útil para disminuir mi sentimiento de culpa tras, una vez más, haber cruzado la línea entre lo que para mi es etílicamente sano y moralmente infranqueable, y lo que es peor, no recordarlo: “si no sangras ni del pene ni de las ano, no debió ocurrir algo tan grave que no se pueda remediar”.

Así que, aunque mi moral mengua y mi cuerpo pide ser rehidratado, mi pene y trasero siguen intactos (¡fiuuf, alivio!), por lo que puedo hacer un esfuerzo y escribir sobre la pelea de Manny Pacquiao vs Shane Mosley, la pelea del año… MI PELEA, que transmitieron ayer.

Pacquiao vs Mosley Mayweather

pacmay

Desgraciadamente cuando vi esta pelea yo ya estaba en el bar donde mi amigo celebraba su cumpleaños. Habían puesto música en vez del audio y la narración de la pelea, y por tal razón no pude observarla ni disfrutarla con plenitud.

Sin embargo, ese no es el combate que yo quiero ver, porque ya todos sabíamos el resultado de aquél; Shane Mosley es viejo (39) y no era rival para Paquiao (32). Yo (y supongo que también la mayoría de las personas con un pene en su entrepierna) quiero ver a Pacquiao vs Floyd Mayweather, esa es la pelea que el planeta está obligado a regalarnos en gratitud por todo ese monóxido de carbono que tan generosamente le brindamos; es la pelea del siglo, MI PELEA del siglo. Ni siquiera la voy a ver, estoy seguro. Será tanta mi excitación que estaré ebrio y dormido antes de que empiece, violando por enésima vez el juramento que acabo de hacer algunos párrafos más arriba.

Para los nerds que nunca han practicado algún deporte (jugar FIFA en XBOX no cuenta como deporte) y no saben a quienes me refiero, una pelea entre Manny Pacquiao y Floyd Mayweather debe de ser el equivalente cualitativo a que una Ultralisk (Pacquiao) se enfrente contra diesisiete Zerglings (Mosley), con las mejoras de armadura y ataque de los zerglings a nivel uno; lo que en lenguaje comprensible para la gente normal se traduciría a una semejanza boxística cercana a la exactitud; francamente yo no sé cuál sea el mejor de los dos.

Algunos acusan a Maywheater de ser un cobarde por no querer pelear contra Pacman pero, por otro lado, el mismo Pacquiao se ha negado a hacerse las pruebas antidopaje que la empresa a la que pertenece Mayweather (Golden Boy Promotions) solicita que se haga.

Será su ego o el miedo de ambos; o los intereses económicos de otros; pero ¿quién está siendo el mariconazo que nos impide ver a estos dos súper atletas pelear? Yo como ciudadano corriente e inculto de clase media exijo esa pelea a todos los gobiernos del mundo. ¿A mí qué mierda me interesa exigirle a la ONU o a mi presidente una mejor educación para mis hijos? ¡Pff! Eso no es lo importante.

Quiero esa pelea… ¡ya!

 

Complejo de Dorian Grey.

Algo que me gusta hacer para no sentirme viejo y motivarme para superarme física o intelectualmente, es hacer una comparación de mí con alguien más viejo o de mi edad. Esto es sencillo de realizar; por ejemplo: uso a Pacquiao, de 32 años. Su cuerpo puede soportar horas saltando la cuerda y lanzando golpes; hace miles de abdominales en unos cuantos minutos y un montón de logros físicos casi sobrehumanos. Yo no puedo hacerlo, pero el hecho de que alguien cuatro años mayor que yo lo haga, eleva en gran medida los márgenes de lo que considero posible para mí.

De la misma manera uso a Kobe Bryant (34), el mejor jugador de la NBA en la actualidad; a Sin Cara (28) y sus acrobacias impresionantes; al Hombre Lata, del flameante “Grupo Latas”; etc. Quizá no sea algo sano, pero me resulta y siento que aún tengo tiempo para convertirme en superestrella de la NBA, pelear en la WWE y precaucionar *percusionar las latas con el mejor sabor costeño para deleite de los turistas. Mañana en el entrenamiento voy hasta vomitar del esfuerzo.

Oscar Wilde: sodomita, fantaseó en su obra más famosa con una juventud inmarcesible (¿y quién nunca lo ha hecho?) Pero eso no es sano. Prefiero cumplir mi fin biológico con una sonrisa irónica que contemplar mis cada uno de mis días como el grano de un reloj de arena… escribiré de esto después, porque necesitaría explicar algunas cosas sobre biología y requeriría extenderme bastante.

¡Feliz día a todas las mamacitas!*Fe de errata: Había escrito “precaucionar”, no sé cómo pasó, pero quise decir “percusionar”

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