Soñé que estaba en un restaurant desayunando con mi primo. Al terminar de desayunar le pedí la cuenta al mesero, y al poco tiempo regresó con una nota de $467.00 pesos… ¡467 pesos por un desayuno de dos personas! Yo miré atónito a mi primo, y le dije algo como: “no mames, ni que estuviéramos en un chingado Ritz” No obstante, saqué un billete de 200 y mi primo pagó el resto. Salimos de allí, pero yo me había quedado pensando en lo caro, e instantes después comprendí que algo estaba mal con la cuenta. Regresamos, pedí al mesero la carta nuevamente y empecé a buscar los precios. Las rebanadas de pastel costaban 45 pesos y las malteadas 44; nos estaba cobrando 200 pesos más. Le reclamamos al mesero, quien parecía sumamente nervioso, pero él decía que así se lo dieron en caja. Luego fuimos a reclamar a la gerente, una gorda inepta de gafas, quien explicó que nosotros habíamos destruido la nota o algo así (la lógica no es muy relevante en los mapas freudianos) y que no había manera de comprobar. Discutimos un rato, y después vi que el mesero comenzó a escabullirse por la puerta. Me acerqué a él para exigirle que me regresara mis 200 pesos, pero el cabrón salió corriendo. Lo perseguí por varias calles del centro de Xalapa, y algunos callejones creados por mi mente; pero yo era demasiado lento. Por más rápido que intentaba mover mis pies, el tipo me llevaba ventaja (algo bastante frustrante, porque la verdad yo corro muy rápido, y el tipo era como de esos bichos raros que se masturban con caricaturas japonesas y no tienen buena condición física); incluso por momentos se detenía para disimular su huida entre la gente. Total que cuando el tipo me llevaba unos 50 metros y yo estaba resignado a perderlo, le grito “¡vas a ver, hijooo de tu puuuuta MAAAAAAAAAAAADRR!” – y me desperté totalmente encabronado y el ritmo cardiaco acelerado.
Ya despierto y consciente me dio risa lo ridículo del sueño y mi reacción. Fui al baño, me eché agua en la jeta y decidí ir a la tienda a comprar una rebanada de pastel y un café, porque me había quedado con el antojo.
Camino a la tienda profundizaba en la explicación psicológica de mi sueño. Lo que concluí fue lo siguiente:
- El dinero que me robó el tipo representa fidedignamente el dinero que le presté a un amigo de mi hermano hace tiempo y que no me ha pagado
- Mi lentitud al correr en el sueño seguramente está relacionada con un problema que tengo en un tendón desde hace varios meses, el cual me impide correr por mucho tiempo
- El pastel es probablemente referente a que hoy es cumpleaños de mi hermano, puesto que yo nunca desayuno pastel; siempre cazo algo o pido huevos y jugo
Hubo otros detalles en los cuales ni quise reparar, como el hecho de que mi primo y yo estuviéramos vestidos con unas camisas hawaianas, o el sueño anterior a ese donde ayudaba a una amiga a estacionar su carro, pero yo estaba en calzoncillos.
En fin. Miren lo que me pasó. Escribo todo esto para aconsejarles que compren algo bueno para correr; sobre todo si corren en concreto. En serio, se van a chingar alguna parte de sus piernas.
Cuando anduve en E.U. aproveché para comprarme esos tenis Starter en 15 dólares, pensando en la putiza que les iba a meter corriendo en concreto, y que no tenía caso comprarme unos Nike; pero ¡puta madre! ¡error, papá! Los tenis baratos no tienen cápsulas amortiguadoras, ni tejidos esponjosos, y la verdad es que el calzado SÍ ayuda a proteger y a dar un mejor rendimiento, incluso a prevenir el SIDA. Ahora, por querer ahorrarme dinero, tendré que pagar un pinche quiropráctico.
Esa marca es buena para ropa; insisto, resisten sus buenas putizas y a un precio económico, pero para correr en asfalto nomás no valen verga.
Anonymous
4 noviembre, 2012 en 3:44
tengo unos exactamente iguales Falso y la neta si me han durado bastante, aunque no los uso para correr, esos se usan para andar ahi en la casa o pendejear, pero no para deportes
Luis Arellano
4 noviembre, 2012 en 7:14
Pinche lanchas, pendejo animal!, ya escribes puras mamadas pinche pendejo!
Anonymous
4 noviembre, 2012 en 13:03
Ay no mames lanchero, vivo en el gabo y la marca Starters no es buena ni en ropa ni en nada. La venden solo en Wal-Mart hasme el puto favor.
favy
4 noviembre, 2012 en 17:02
se ve que calzas grande!!
Anonymous
4 noviembre, 2012 en 19:15
Desiste de escribir pendejadas y mejor imprime el libro que estabas “EzKriBIendó” para que me lo regales.
Anonymous
5 noviembre, 2012 en 3:54
we crei que tu regreso iba ha ser como la segunda temporada de house pero mejor vete a la verga otros 6 meses
Emilio Alejandro
5 noviembre, 2012 en 15:55
jajajaja a mi me dio mucha risa, los pendejos que están reclamando el contenido del post que se vayan a leer a dostoievski, esto es para divertirse.
Anonymous
6 noviembre, 2012 en 3:32
No mames falso xalapitos quien no se desmadra los pies con eso tenis y mas si se usan para correr
Anonymous
6 noviembre, 2012 en 3:36
Se re autopsicoanalizaba el loco..
Anonymous
6 noviembre, 2012 en 4:38
Pues en realidad Falso Veracruchango sí trata de meterle contenido ”oculto” a sus tesis y tonos. Incluso da pistas sobre los temas a tratar. Enriquece los contenidos. Ay, qué chupabolas soné.
Anonymous
6 noviembre, 2012 en 7:28
Wey mandalos a la verga a todos and go for it!! La rifas!!
MeDoRiO X
6 noviembre, 2012 en 20:23
“Escribiré cada martes y/o viernes, aunque sea cualquier cosa. Ya no me voy a forzar a escribir cosas especiales y con cierto nivel de creatividad o dedicación”
Por que chingan tanto?
Dostoievski
7 noviembre, 2012 en 2:26
El punto, mi buen, es que tienes un público que está acostumbrado a eso que tú llamas esfuerzo que ponías en escribir algunas cosas -yo lo llamo fluidez pues tus posts eran fáciles de leer y tenían un hilo conector que los hacía interesantes.
Todo iba bien hasta que te entró el virus de la política y valiste verga, como los tenis. Fue una caída en picada entre lo que querías decir y lo que tu viejo público espera del personaje: machismo, chingonería y el entretenimiento a veces sustancial del que has hecho gala.
Desde entonces se nota que haces es el esfuerzo pero no te sale lo que quieres escribir y te amparas en la sentencia de “mejor ya no hago el esfuerzo”, no sé si debido al número de críticas negativas.
Si tu personaje de Falso Profeta ya no da para más, sería bueno enterrarlo; si sí, sería bueno regresarlo al camino. No es tan difícil aunque no basta con un cambio de diseño en la plantilla.
Saludos.
Power Pig
7 noviembre, 2012 en 22:32
Acéptalo pinche Falso.
Nunca podrás satisfacer a la nueva horda de caguengues hipster que te siguen, así que tu personaje está en decadencia, pero que te valga verga. De ejemplo te puedo mencionar al wey de salaverga, y de contra-ejemplo tienes a ese “niño eterno” del huevo.
O puedes escoger algo mejor, como escribir de una vez por todas tu PUCTO libro o salirte por fin de la casa de tu MADRE. Cualquiera de las opciones son harto interesantes.
Abur!
Anonymous
8 noviembre, 2012 en 9:24
estas bien pendejo falso proxeneta…………
Anonymous
22 noviembre, 2012 en 8:46
que paso taka taka antes eras mas chido
David Temper
17 diciembre, 2012 en 2:06
Ajajajaj que pedo con esa raza que dice “Antes eeras chéeevere…” a todos ellos les pregunto cual es su puto privilegio para exigir entretenimiento. Ni que estuvieran pagando boleto y aun así el entretenimiento recibido es a juicio del artista que decidieron ver.
ya déjense de mamadas caguengues de mimados mileniales y aprecien un post sencillo y auténtico!!!
(y)
Anonymous
17 diciembre, 2012 en 4:32
Pues es cierto, Falso, todo lo que escribes es cierto! No se debe reparar en gastos si de tennis se trata, sólo las buenas marcas deportivas valen la pena. Yo lo supe cuando después de unos años volví a comprar PUMAS… mis dolores de pies y espalda desaparecieron el primer pinchi día y yo creía que estaba enfermando o algo, era por los putos tennis baratos de mierda que antes compraba y con los que sufrí durante años.