Más Bibianos, menos periodistas castrosos

Total que hoy leía el Blog del Narco y me topé con esta imagen:

La verdad me eché a reír, y creí que algo mal ocurre conmigo por haberme reído de un asesinato, pero leyendo los comentarios caí en cuenta de que si algo mal ocurre conmigo lo ocurre también con el 70% de las personas que leen ese blog (que son cientos de miles).

Esta insolencia hacia la muerte tiene una explicación muy sencilla. Cuando golpeamos la pared fuertemente con el puño, éste nos duele mucho; pero, si continuamos dando un golpe a la pared diariamente, al paso de las semanas nuestros huesos se habrán fortalecido y el dolor será mínimo. Lo mismo pasa con nuestra capacidad de impresión: tanto lo vemos que hasta nos acostumbramos. La maravilla de la adaptación de la mente humana; somos cucarachas inteligentes.

¿Pero por qué me reí? ¡Pues por lo ridículo de la foto y el proceder de las autoridades!

Originalmente el tipo había sido colgado de un puente con un narcomensaje; pero lo realmente grotesco fue toda la parafernalia para bajarlo de allí.

A algún genio de la policía se le ocurrió la brillante idea de pedir prestado un tráiler para usarlo como escalón y desde el tráiler bajar al muertito al piso.

¿Para qué quitarlo rápidamente de la vista de la gente jalándolo hacia arriba, si bien se puede esperar una hora a que pase un tráiler, pedirlo prestado, estacionarlo debajo del puente, poner con torpeza al muerto sobre la caja, subir a varios elementos de la policía a la caja y desde allí bajar al muerto colgando del cuello con la misma cuerda con la que fue ejecutado? ¡Esa sí es una buena puta estrategia, jefe!

Jaja, lo mejor fue el comercialazo gratis para Frio Express. Qué ironía que un tráiler que transporta mercancía fría esté adornado con la fría muerte, ¿no? Ni a la mejor agencia de publicidad se le podría ocurrir algo tan ingenioso… “Frio Express, conservando tus carnes frescas desde 1978″, “Frio Express, refrigeramos y apoyamos a la policía”, “Frio Express, llevamos perecederos”.

Para la próxima vez que necesite transportar algo seguramente llamaré a Frio Express. Se ganaron mi consumo con eso.

El cártel que ejecutó al hombre es el llamado “Cártel de los Caballeros Templarios“… No estoy mintiendo, así se llaman… primero matan a sus víctimas colgándolos de un puente y después les roban todos sus items que tienen en su cuenta de Dungeons and Dragons; un grupo realmente pesado. ¿Por qué se habrán puesto ese nombre? ¡En qué estaban pensando, por Dios! Para la próxima será algo como “Priorato Dragon Ball de la Muerte” o “La Orden de los Narcos Omega”…. ¡pff!… pero en sus mensajes dicen que se encargarán de exterminar a todos los grupos de secuestradores y extorsionadores, y si tal fuera el caso, entonces el nombre sería lo de menos.

Un jefe de policía muy bruto el que ordenó esas hazañas de ingeniería para bajar al muerto. Miles de jefes así tenemos en México. Mas nos quedan algunos competentes y -lo que más falta nos hace en estos tiempos- valientes. Tales casos son el del coronel Julián Leyzaola Pérez y el de -en un grado menor de capacidad pero no de valentía- el General Bibiano Villa

Ambos tienen fama de ser incorruptibles y muy duros contra la delincuencia; sin embargo, también la tienen de abusar de su autoridad y de violar los derechos de otros.

Bibiano Villa es un exmilitar y ahora secretario de seguridad que realmente odia a los delincuentes. Explícitamente y sin ningún tipo de eufemismo políticamente correcto declara en las entrevistas que “si agarra vivo a un zeta, lo mata”, que él a los narcos les tira a matar, que si algún día alguien quiere llegar a comprarlo también lo mata y que de vez en cuando hay que darle una ayudadita a Dios con la gente que se lleva. Se siente orgulloso de haber ingresado a los 17 años al ejército mexicano, es amante de las mujeres, siempre anda armado y dice ser nieto del héroe revolucionario “Pancho” Villa.

En pocas palabras, es el hijueputa malencarado y sicópata al que jamás te gustaría chocarle con tu carro, una versión mexicanizada de Charles Bronson en Death Wish que va matando criminales por todos lados. No obstante, sus métodos están siendo satanizados en este momento por los mismos periodistas hipócritas de siempre, quienes solo critican lo que les conviene y les dé protagonismo periodístico, tan lejanos de la realidad de la gente de los poblados que viven aterrados por el narco y sin siquiera aportar una solución distinta a la que se critica.

En este caso se trata de Carmen Aristegui (¡qué sorpresa!), otra periodista de nombre Sorjuana Martinez y un imbécil de Human Rights Watch que defiende fieramente los derechos humanos de los mexicanos… ¡desde Washington!

Podrán parecerles muy alarmantes las declaraciones de este jefe policiaco diciendo que él mata a los delincuentes, pero este tipo de personas son necesarias en una sociedad violenta que desea estabilidad. Este tipo de “limpiezas” han ocurrido un sinnúmero de veces en todo el mundo y siguen ocurriendo, solo que con la mayor discreción posible. Son, pues, un mal necesario. El error de Bibiano Villa ha sido salirse de la alcantarilla donde se trabajan estas cuestiones y que su boca atrajera la atención de todos.

Ahora estos periodistas se espantan, manipulan la información y elevan a Bibiano al mismo nivel que los delincuentes o peor. Como si en verdad el tipo y su gente fueran a ponerse a dispararle a toda persona que los viera mal, cuando él mismo aclara que “solo dispara cuando alguien más le apunta”. E, increíblemente, la periodista Sorjuana Martinez critica que, en los enfrentamientos entre el ejército y los delincuentes armados, haya en promedio 10 muertos de los grupos criminales y ninguno del ejército, porque “los del ejército tiran a matar” (segundo video, min. 7:43). ¿Pues qué esperaba esta idiota?  ¿que les dispararan flechas de cupido o qué? ¡Por dios, si los tipos les están disparando! ¿Cómo chingados quiere que no les tiren a matar? ¡Qué estupidez!

Yo creo que urgen comandantes como Bibiano Villa, el costo social es bajo o nulo si uno no anda metido en asuntos turbios. Fájate la camisa, camina recto y con las manos limpias y a la vista, así no te meterás en problemas con el general Bibiano y su gente. Tan sencillo.

O ¿de qué otra manera se combate a gente mala, inconsciente y cobarde que llega en camionetas y se pone a disparar contra medio mundo incluyendo mujeres y niños? Todos sabemos qué tan mal es el sistema judicial en México, si arrestan a un criminal de estos, en una semana anda en las calles nuevamente matando y secuestrando. Lo que hacen personas como el general es corregir este fallo del sistema.

Y el idiota de Derechos Humanos condenando categóricamente las maneras de Bibiano Villa, cómoda y seguramente desde Washington, totalmente ajeno de la realidad. Que les diga él y los demás de Derechos Humanos, a las personas a quienes les secuestraron un hijo y lo mataron aún habiendo pagado el rescate, que los delincuentes merecen un juicio justo y un buen trato. Que le digan a los familiares de Marisela Escobedo que los matones desalmados de la linea se regenerarán con escuelas de computación y canchas de basquetbol. Que vaya a Nuevo León, a Tamaulipas, a Juárez, a los poblados serranos de Durango en donde los zetas van y queman las casas, casos de extrema tristeza, que la violencia no se combate con violencia. Y si no lo hace, que se meta su intercesión por los derechos de esas ratas por el culo. Los derechos humanos son para humanos solamente, no para ellos.

La delincuencia organizada se combate atacando a la pobreza que los obligó en primera instancia a ser narcos, mejorando la educación y fomentando los valores. Pero esa es la solución a largo plazo, hay lugares en donde no pueden esperar cinco o diez putos años a que todas estas acciones tengan efecto, están desesperados. Mientras tanto necesitamos de mano dura, de alguien que nos limpie las calles de toda esa basura, de personajes como Villa y Leyzaola.

Lo gracioso es que al final de su programa, a Carmen Aristegui le salió el tiro por la culata, pues recibió críticas severas y mentadas de madre por parte de sus radioescuchas que viven en ciudades violentadas y en cambio hubo respuestas muy a favor de Bibiano Villa, nieto de Pancho Villa (que ni es algo tan fascinante porque Pancho Villa debe de tener como 300 nietos).

Take that, bitch!